La mitología detrás de la medicina.
En la Grecia antigua se consideraba que la habilidad de curar a las personas o de sanar algunas heridas era uno de los deberes de los dioses; es por eso que se tenía un dios encargado de la sanación de los enfermos, el cual era llamado <“Asclepios”>. Cuenta la mitología que Asclepios, hijo de Apolo, un día fue dejado a cargo de un centauro por su padre. El centauro al ver las destrezas del niño, decidió enseñarle el arte de la medicina y de la caza, y como resulto ser un excelente aprendiz recibió de regalo dos redomas[i] llenas de sangre de Gorgona de parte de Atenea. Una vasija tenía sangre envenenada, y la otra propiedades para resucitar a los muertos. Asclepios domino rápidamente el arte de curar heridas y resucitar a los muertos, hecho que a Zeus disgusto mucho, y cuando Asclepios resucito a Hipólito Zeus enfado tanto que mato a Asclepios con un rayo. Pero Asclepios al morir, subió a los cielos y plasmo en el firmamento la constelación de la serpiente u ofiuco, símbolo que siempre está presente en los símbolos de la medicina.
La medicina de los mortales.
El índice de mortalidad era muy alto, la mayoría de las infecciones, eran tratables, pero por la ausencia de remedios o medicamentos, la mayoría de las personas creía que su dios Asclepios bajaría de los cielos para curar a su familiares, amigos o a ellos mismos cuando enfermaban; y en el peor de los caso eran llevados a las puertas del <santuario de este dios> para que los curase. Esto lógicamente no resultaba. Fue así como los griegos por pura curiosidad comenzaron con el estudio de las propiedades de las plantas. Las cuales a simple inspección resultaban fascinantes.
Al estudiar las <propiedades de las plantas>, los griegos descubrieron que estas eran capaces de producir desde disminuir inflamaciones, hasta la muerte. Después de probar con cada planta por separado, descubrieron que al juntarlas daban efectos tóxicos o potenciados y que al diluirlos o combinarlos con sustancias como el agua, su administración era más sencilla.
Fue así como en esta antigua civilización tras la religión se pasó a la experimentación y después a todo una ciencia que tras siglos de estudio, nos mantiene ahora a muchos saludables y gozando de un vida un poco más longeva.
RECURSO PROPUESTO:
El artículo que a continuación se presenta, nos menciona que en Israel, se ha inventado un detector de mentiras usando la ciencia de la grafología. <continua por aquí ...>
[i] Vasija de vidrio ancha en su fondo que va angostándose hacia la boca.
Hola Ángel: muy interesante es ver cómo la necesidad de respuesta - no encontradas en el pensamiento mágico - llevan al hombre a plantearse nuevos caminos, por cierto más objetivos, para satisfacer las mismas.
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Recurso: requisito cubierto.